Existe consenso en la Psicología moderna en calificar los celos como un estado emotivo ansioso que padece una persona caracterizado por el miedo ante la posibilidad de perder lo que se posee, sea amor, poder, imagen profesional o social.
La persona que sufre de celotipia tiene un perfil psicológico cuyas características son baja autoestima e inseguridad; altas necesidades de estimación y aprobación externas; demanda de ser amado o amada, con dosis de egoísmo y desconfianza.
Los celos están denominados como sentimientos y pensamientos bajos, dañinos y destructivos, al igual que la ira, la rabia y el resentimiento. Afectan no sólo a la persona que los siente, sino también a quien está alrededor del afectado; en tercer lugar dañan la atmósfera del hogar.
Los celos pueden llegar a afectar al cuerpo, generando una serie de desequilibrios como gastritis, colon irritable y otros daños para quien los siente. En el caso de padecer de celos enfermizos, la persona celosa puede llegar a extremos máximos, como la muerte. Entre los latinos una de las causas más comunes de asesinatos son los celos despechados.
Por qué eres celosa (o)?
Antes de darte consejos puntuales, es bueno entender qué te está haciendo morir de celos. Identifica la razón: ¿Es inseguridad, tu niñez, tu pasado, tu propia historia de infidelidad (si encontramos difícil ser fiel, no esperamos que otros lo sean) o una combinación de las cuatro?
En todo caso, no interesa tanto la causa como el reconocimiento de la necesidad de controlar nuestros celos de ahora en adelante. Lo importante es considerar el nocivo efecto de los celos en nuestras vidas y en la de quienes nos rodean ya que hasta los hijos sufren.
Los celos según la Biblia son obra de la carne, de nuestra naturaleza pecaminosa y nuestro yo egoísta descontrolado.
Santiago 3:14-15 dice, “Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis ni mintáis contra la verdad, porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica.”
Santiago 3:16 "Porque donde hay celos y ambición personal, allí hay confusión y toda cosa mala."
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