Friday, March 27, 2015

UNIDA EN YUGO DESIGUAL Y CON SUEGRA DIFICIL DE SOBRELLEVAR

Buenos días doctora,
Quisiera saber que hacer con mi situación, yo he sido cristiana desde niña y cuando llegué a la juventud me alejé de la iglesia en ese momento conocí, al que hoy es el padre de mis hijos. No me he casado. Me metí en yugo desigual, y al volver a buscar  de Dios me di cuenta que había cometido muchos errores. El no quiere buscar de Dios y yo no me siento feliz. Como si fuera poco, él es hijo único y nos ha tocado vivir con la mamá, esto empeora la situación por que ella se mete mucho en la relación, hasta un día me dijo que yo tenia algo que era de ella, por supuesto su hijo. El tampoco ve importante el matrimonio y yo me siento mal por estar en pecado.



Entiendo lo complicado de tu situación y lo difícil que debe ser convivir con una suegra como la tuya, sin ni siquiera estar casada con su hijo. No me dices la edad de tus niños y ése es un dato importante para poder aconsejarte mejor. La vida en pareja requiere de una alta dosis de esfuerzo y sacrificio sobre todo cuando se tienen hijos. 



Si ellos fueran grandes, mayores de edad, te aconsejaría separarte por un tiempo prudencial, dado que no estás casada, para que tu marido reaccione y se dé cuenta de los cambios que tiene que hacer en sí mismo y en la relación con su madre para no perderte. Pero si tus niños son pequeños, harías mal poniendo tu propia felicidad por encima de la de ellos, De eso se trata el amor incondicional de madre....y de mujer (casada legalmente o no) del padre de tus hijos.



En cuanto a tu situación con tu suegra, no eres la única  mujer en el  mundo que tiene que lidear con un problema así. Mi consejo para todas: Qué debe hacer la nuera si no le queda más remedio que vivir algún tiempo con su suegra si ella se comporta de manera insoportable?  Ignorar, respirar  y sonreír.




Es aconsejable ignorar los momentos incómodos en los que un comentario de mal gusto saldrá a la luz en plena reunión familiar, en un almuerzo casual o en una fiesta. Siempre y cuando no pase a la grosería o a la agresión verbal, deja que ella solita se ría de sus chistes malos o de sus indirectas venenosas.



Tú siempre serás la dama, la que juega sus cartas inteligentemente y no deja afectarse por cualquier dardo verbal. Eso demuestra madurez y compostura. Respira hondo y saca a relucir tu hermosa sonrisa. Cuando sea demasiado entrometida, simplemente no le des pié a que se meta en tu vida: no le cuentes cosas personales, no recalques los defectos de su hijo, no le contestes de mala manera ni le pongas mala cara porque al fin y al cabo, la mejor salida es no confrontarla: es la madre de tu esposo y si él la ama, tú también deberás quererla.


Finalmente, tu mayor problema es que tu marido no conoce a Dios. Tienes que redoblar tu tiempo de oración y la intensidad de tus oraciones por su salvación, en tus oraciones matutinas, durante el día y al acostarte.



Que te sirva de consuelo lo que dice el apóstol Pablo en 1 de Corintios 7: 13  "Y la mujer cuyo marido no es creyente, y él consiente en vivir con ella, no abandone a su marido. Porque el marido que no es creyente es santificado por medio de su mujer .…"



Y memoriza estos versículos de 1 de Pedro 3:1-2 "Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos, de modo que si algunos de ellos son desobedientes a la palabra, puedan ser ganados sin palabra alguna por la conducta de sus mujeres al observar vuestra conducta casta y respetuosa."


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